"Ese lugar en el que me pusieron donde Cristina me manejaba, me torturaron durante años con ese tema", se quejó el mandatario nacional en una entrevista con Noticias Argentinas. 

"A mí me encanta la valentía de los que dicen animémonos y vayamos, porque al final de cuentas todos me pedían que hiciera eso, pero yo nunca vi a ninguno de ellos enfrentar una mirada de Cristina como yo enfrenté la mirada de Cristina. Yo prioricé ahí la unidad y lo haría mil veces más", enfatizó el Presidente. 

Al ser consultado sobre si se sintió acompañado por Cristina Kirchner en estos cuatro años, el jefe de Estado respondió: "No, sentí que Cristina tiene una mirada distinta a la mía y a mí eso no me interesa, y me parece válido y legítimo. Creo que en algunas cosas pudo haber tenido razón y en otras cosas no, que se yo... Creo que, además, tiene un modo de hacer política que a mí no me gusta, que tiene que ver con esa forma personalista de hacer política, pero yo la respeto, es una mujer que ha sido dos veces presidenta, una vez vicepresidenta".

Además, señaló que durante su gestión se habló mucho sobre si ambos tenían contacto y reflexionó: "Era muy loco porque los medios me decían qué era un títere y cuando no hablaba que era dramático porque no hablábamos. Esto lo vi durante cuatro años, ese lugar en el que me pusieron donde Cristina me manejaba, me torturaron durante años con ese tema".

"Después resultó que descubrieron que yo tenía miradas diferentes y tomaba distancia de Cristina, ´Qué barbaridad institucional no se habla con la Vicepresidenta´. Me volví a hablar con Cristina: ´Qué desastre la escucha´. Así fueron estos cuatro años en los medios. Por eso hay que restarle importancia", indicó Fernández.

Y sobre si habían aclarado la situación de quién tomaría las decisiones antes de iniciar el mandato, sentenció: "En su momento lo hablé, creí que había quedado claro, pero no fue así, pero ya está, es historia".