Un fuerte ajuste con alto impacto social
La política económica del gobierno de Milei se centró en un ajuste ortodoxo para estabilizar las variables macroeconómicas. Sin embargo, esto se tradujo en una pérdida de 261 mil puestos de trabajo registrados entre noviembre de 2023 y agosto de 2024, según cifras de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT). En el mismo período, el salario promedio cayó un 3,7% en términos reales.
El ajuste incluyó una devaluación del 118%, desregulación de sectores clave de la economía y un aumento importante en las tarifas de servicios públicos como luz, agua, gas y transporte. Estas medidas dispararon la inflación, que alcanzó picos de 25,5% en diciembre de 2023, 20,6% en enero y 13,2% en febrero de este año. Aunque los niveles se moderaron en los últimos meses, CEPA alerta que esta desaceleración fue más producto de la caída del consumo que de una mejora estructural.
La economía: un rebote errático
El informe destaca que la actividad económica sufrió una fuerte contracción a principios de 2024, alcanzando un piso en abril con una caída del 4,4% respecto a noviembre de 2023. Aunque hubo repuntes en meses posteriores, el crecimiento fue desigual. En el tercer trimestre, la economía cayó un 3,1% interanual, y excluyendo al sector agropecuario, el desplome alcanzó el 5,5%.
Heterogeneidad en el empleo
El impacto laboral fue desigual entre sectores. Mientras el agro, la minería y la pesca crearon algunos puestos, sectores como la construcción (-66.000 empleos) y la industria manufacturera (-29.600 empleos) lideraron las pérdidas.
En cuanto al poder adquisitivo, los trabajadores registrados privados lograron una recuperación parcial (-1,5% respecto a noviembre de 2023), pero los empleados públicos (-16,1%) y no registrados (-20,1%) sufrieron retrocesos mucho más severos.
Inflación y consumo en crisis
La inflación acumulada desde el inicio de la gestión es cuestionada por CEPA, que señala que el método actual del IPC subestima los incrementos en servicios esenciales como transporte y energía. Según una estimación ajustada por la Encuesta Nacional de Gastos de Hogares 2017/18, la inflación real sería un 8,5% mayor a la reportada oficialmente.
El consumo masivo se contrajo drásticamente debido a la pérdida de poder adquisitivo, lo que limitó el aumento de precios en bienes básicos. Esta caída del consumo, junto con una política devaluatoria controlada, permitió cierta estabilidad inflacionaria en los últimos meses.
Perspectivas para 2025
De cara al futuro, el informe de CEPA advierte que 2025 no traerá mejoras sustanciales. La falta de recuperación salarial limitará la demanda interna, y las desigualdades entre sectores económicos se profundizarán. Aunque el gobierno podría mostrar datos positivos en los primeros meses de 2025, estos serán consecuencia de la comparación con un 2024 marcado por la recesión.
El primer año de la gestión de Javier Milei ha sido un período de transformaciones profundas con efectos económicos y sociales contrastantes. Mientras que algunas variables macroeconómicas muestran mejoras, los costos sociales, medidos en términos de empleo, salarios y consumo, evidencian un deterioro en las condiciones de vida de gran parte de la población.