Tras una discusión breve, los jefes de los partidos Gerardo Morales (UCR), Federico Angelini (PRO), Miguel Ángel Pichetto (Peronismo Republicano) y Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica) decidieron pasar a un cuarto intermedio, ante la imposibilidad de encontrar un punto de acuerdo alrededor del desembarco del cordobés.

Según deslizaron, el debate duró apenas ocho minutos, con un final áspero. Si bien las partes no descartan la posibilidad de seguir dialogando, por el momento los rechazos de sectores del PRO son intensos.

En la escena actual, Gerardo Morales, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, Pichetto y la Coalición Cívica están a favor. También están en ese grupo el senador Martín Lousteau y el disputado Facundo Manes, entre otros.

En contra se expresaron la precandidata presidencial del PRO Patricia Bullrich, junto al candidato a gobernador de Juntos por el Cambio de Córdoba, Luis Juez, y la UCR de esa provincia, entre otros, como Ricardo López Murphy y Alberto Asseff. Los tres llegaron de forma imprevista a la reunión para marcar el descontento con la iniciativa.

Juez asistió de sorpresa y sin invitación al encuentro que tuvo lugar en Alsina y Entre Ríos, donde primero se entrevistó con los presentes, expuso su acalorada negativa, y luego se retiró.

Angelini planteó primero que para aceptar el ingreso del referente de Avanza Libertad José Luis Espert el PRO ponía como condición que no fuera candidato presidencial.

La reunión también tenía en agenda la suma de la bonaerense Margarita Stolbizer, que tampoco se aprobó por el clima de tensión, pero que cuenta con el aval de todos. "Stolbizer está adentro", dijo Pichetto en declaraciones a la prensa tras la reunión. 

El encuentro se desarrolló en momentos en que los ánimos estaban caldeados de antemano por las críticas de Bullrich a Rodríguez Larreta y Morales, a quienes acusó de ser amigos del ministro de Economía, Sergio Massa.

El jefe de la UCR salió al cruce de sus dichos, la catalogó de "soberbia" y dijo que Juntos por el Cambio "está hace tres meses en picada por culpa de la interna entre Horacio y Patricia", al tiempo que acusó a la ex ministra de Seguridad de alentar esa disputa dentro del PRO.