El organismo llegó a este resultado mediante una serie de fiscalizaciones y cruces de información llevados a cabo por la Dirección General Impositiva (DGI). La investigación determinó diferencias de impuestos en operaciones internacionales y precios de transferencia del corriente año. 

Como resultado de estos ajustes, la AFIP estableció una multas superiores a $376 millones sobre este universo de contribuyentes por declaraciones fraudulentas en el Impuesto al Valor Agregado e Impuesto a las Ganancias, incumplimiento de pago en Ganancias, IVA e Impuesto a los Débitos y Créditos y omisiones en las declaraciones juradas del Aporte Solidario y Extraordinario. 

La AFIP detectó que contribuyentes que pertenecen a los sectores de mayor capacidad económica del país presentaban inconsistencias e irregularidades en materia de determinación del impuesto a las Ganancias, traslados de quebrantos impositivos y resultados contables presentados ante el organismo.

Por último, el organismo también aplicó multas a los agentes de retención y percepción por la falta de ingreso del tributo percibido o retenido, además de realizar distintas denuncias penales por aprovechamiento indebido de subsidios, evasión simple y asociación ilícita fiscal.