Los datos más recientes del Instituto Argentino de Análisis Fiscal revelan que en enero de 2024, las transferencias automáticas a las provincias experimentaron una preocupante disminución del 7,5% en términos reales, afectando de manera sustancial a la economía jujeña, que padeció un descenso del 5,2%.
El impacto del ajuste presupuestario se siente de manera particular en Jujuy, así como en las provincias vecinas de Salta y Santiago del Estero, donde la coparticipación sufrió un descenso del 5,2%. Contrastando con estas cifras, jurisdicciones como la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) tuvieron una caída mínima del 0,4%, mientras que Neuquén y Chubut registraron descensos moderados del 1,3% y 2,2%, respectivamente.
La reducción en la coparticipación no solo impacta en los ingresos provinciales, sino que también repercute directamente en salarios, políticas públicas y, de manera contundente, para la ejecución de obras públicas en toda la región. Además, la entrega de aportes coparticipables a municipios y comisiones municipales se verá comprometida, generando una situación crítica para la gestión gubernamental de Jujuy.
Análisis del informe fiscal
El informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal brinda una visión más detallada de la situación. Al mensualizar la caída acumulada de la primera quincena al resto del mes, las transferencias automáticas podrían tener un descenso del 7,5% en términos reales en comparación con el año 2023. Dentro de este escenario, provincias como Buenos Aires, Salta y Misiones enfrentan las mayores adversidades con disminuciones del 11,1%, 7,8%, y 7,4%, respectivamente. En contraposición, CABA, La Pampa y San Luis presentan las menores caídas, con un 4%, 5,5% y 5,6%.
Asimismo, el informe destaca que, al descontar transferencias por leyes especiales y compensaciones, la coparticipación neta del consolidado sufriría un descenso del 4% en términos reales respecto al mismo periodo del año anterior, afectando a todas las jurisdicciones de manera homogénea. La disminución del 7,5% en las transferencias automáticas nacionales equivale a una reducción real del ingreso total del consolidado del 3,5% en enero en comparación con el año anterior. Provincias como Jujuy, Salta y Santiago del Estero se encuentran entre las más afectadas, con una disminución del 5,2%, mientras que CABA, Neuquén y Chubut registran caídas menos pronunciadas.
Peligro por la escaladada de la inflación y el rojo financiero
A los desafíos derivados del recorte presupuestario se suma la inquietante tasa de inflación. En diciembre, Jujuy se elevó a 26.1%, superando la media nacional y la del Noroeste Argentino (NOA). Esta combinación de factores coloca a la provincia en una situación crítica y anticipa el ingreso al "rojo financiero del sector público" al igual que otras provincias de las denominadas "pequeñas".
En el marco de un acercamiento político, el gobernador Carlos Sadir sugirió recientemente que hay puntos que "se pueden acompañar de la Ley Ómnibus y otros que deben revisarse", pero ese "guiño positivo" del gobierno radical local a acompañar el proyecto de Milei parece que no tiene devolución desde la Casa Rosada.
La situación económica y financiera de Jujuy se perfila como un tema central en la agenda política, requiriendo otras estrategias para asegurar la estabilidad y el desarrollo a largo plazo, o directamente sumar apoyo con otros mandatarios provinciales para engrosar los pedidos unánimemente.
La ley Ómnibus de Milei se discute en el Congreso, pero en las provincias los gobernadores tienen una olla de presión por la inflación, recesión y salarios en riesgo. Y casi tocando la puerta los reclamos de los trabajadores informales, jubilados y pensionados, y trabajadores registrados/autónomos, por la pérdida del poder adquisitivo.
