Lavezzi, reconocido por su paso por equipos como PSG, Argentina y San Lorenzo, acudió al encuentro para apoyar a su sobrino Agustín, quien forma parte de Tristán Suarez y usa la camiseta número 7. El joven Lavezzi tuvo una destacada participación en el partido, anotando el gol que igualó momentáneamente el marcador ante Almirante Brown.

La presencia de Ezequiel Lavezzi en el estadio de Isidro Casanova marcó su primera aparición pública luego de su período de internación.

La noticia de su hospitalización generó preocupación entre sus seguidores, especialmente ante los rumores sobre posibles problemas de adicción y una crisis personal que lo habría llevado a terapia intensiva.

Sin embargo, su hijo Tomás se encargó de desmentir dichos rumores a través de las redes sociales, asegurando que su padre se encontraba bien y recibiendo tratamiento, y pidiendo que se deje de difundir información falsa sobre su estado de salud.