El partido comenzó con muchas expectativas, ya que el "Millonario" quería ampliar la diferencia que lo tiene como puntero en la fecha 19 de la Liga Profesional.

Sin embargo, las expectativas deportivas se esfumaron rápido en el campo de juego, ya que todas las miradas apuntaron hacia una de las tribunas donde ocurrió una tragedia.

En los minutos iniciales del partido, la hinchada local empezó a jugar su propio partido. Con muchos movimientos y una lluvia de silbidos alertaron que algo estaba pasando. Fernando Rapallini, el encargado de impartir justicia, detectó la anomalía y detuvo el trámite de forma provisoria.

Después de algunos minutos de parate, el juez decidió darle continuidad al desarrollo, aunque desde afuera se hicieron notar los hinchas con cánticos, silbidos y abucheos para dejar en claro el descontento generalizado porque ya se conocía que un hincha había fallecido al caer de la tribuna. 

La policía y los encargados de seguridad del estadio se enteraron de lo que estaba ocurriendo, por lo que informaron rápidamente a la terna arbitral. Fue ahí cuando Rapallini llamó a los capitanes y decidieron -de manera unánime- ponerle fin al pleito. 

Los protagonistas se dirigieron hacia los vestuarios y realizaron un respetuoso aplauso, en señal de desazón y lástima.

Una muerte absurda en un estadio, otro triste episodio en el fútbol argentino.