Así, Fernández repudió la violenta represión contra los manifestantes que apoyaron a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner frente a su casa tras el vallado que generó el escándalo.

"En el día de hoy el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires dispuso desplegar un operativo policial con vallas que impedían la libre circulación en las inmediaciones del domicilio de la Vicepresidenta de la Nación", inició su hilo de Twitter el jefe de Estado.

Según describió, "el operativo, lejos de aportar a la tranquilidad invocada, generó un clima de inseguridad e intimidación", y, por eso expresó su "más enérgico repudio a la violencia institucional desatada por el Gobierno de la Ciudad frente a una masiva manifestación de ciudadanas y ciudadanos expresándose en libertad y en democracia".

"Las autoridades de la Ciudad de Buenos Aires y sus fuerzas de seguridad deben trabajar para cuidar la seguridad ciudadana evitando crear contextos de hostilidad ante masivas movilizaciones", consignó el mandatario.

Fernández dijo, entonces, que "mantener la paz social y garantizar el ejercicio de libre expresión de las personas es su responsabilidad institucional".

Asimismo, sentenció que "es imperioso que cese el hostigamiento a la vicepresidenta Cristina Kirchner y garantizar el derecho a la libre expresión y manifestación de los ciudadanos y ciudadanas".

"Asimismo, exhorto a la dirigencia opositora que cesen las expresiones provocativas y violentas y permitan que todos los actores se expresen responsablemente para garantizar la paz social", concluyó.

Este sábado por la mañana, la esquina del domicilio de la ex presidenta amaneció vallada por el gobierno porteño, hecho que desató que diversas manifestaciones que iban a realizarse de manera separada en lugares de CABA y el conurbano bonaerense se concentrasen allí, en Recoleta. Ante eso, Larreta decidió enviar a la Policía y se produjo la represión, y acciones insinuantes como perimetrales, cámaras policiales filmando y llamativos volquetes con piedras.