En ese marco, destacó la necesidad de “hacer mucho más fuerte al Mercosur” porque “tenemos por delante una oportunidad formidable y única para ir en socorro del mundo hambriento, si es que sabemos ponernos de acuerdo para aprovecharla”.

Asimismo, remarcó que "estamos caminando todos en la cornisa y yo no quiero que ninguno se caiga: quiero que sigamos transitando juntos esta etapa y que la superemos juntos”.

Fernández resaltó que los países de la región son “enormes productores de alimentos” y pueden “ser, además, grandes proveedores de energía”, por ello llamó a “fundar otro Mercosur que nos haga trabajar juntos y en el que nos prestemos la potencia que tenemos para que todos seamos más potentes”.

“Tenemos la enorme suerte de que América Latina es una zona de paz, es un continente sin vocación de guerra, y eso es una gran ventaja en el tiempo que vivimos”, formuló el Presidente.

“Éticamente tenemos el imperativo moral de ponernos de acuerdo para producir los alimentos que el resto del mundo necesita. Todos debemos querer un continente más justo, más equilibrado e igualitario y que interactúe con otra inteligencia, donde podamos hablar mucho más y tomar decisiones en conjunto porque el mundo que se viene es el mundo de las regiones, no de los países, y por eso debemos hacer mucho más fuerte a nuestra región y al Mercosur”, añadió.

“Estamos en un continente que tiene lo que el mundo busca para el mañana, y si no nos damos cuenta que tenemos que estar más unidos que nunca, vamos a cometer el peor de los errores”, concluyó.

Luego de las exposiciones de los mandatarios se realizó la ceremonia de traspaso de la Presidencia Pro Témpore a la República Oriental del Uruguay.

Al finalizar la actividad, Abdo Benítez ofreció un almuerzo en honor a los Jefes de Estado presentes y sus respectivas comitivas en el complejo del Chaco/Tosa.