En el comunicado, las compañías petroleras reconocen que la situación actual se vio afectada por una serie de factores que han llevado a la escasez de combustibles. Estos factores incluyen una demanda excepcionalmente alta en las últimas dos semanas debido a eventos como el fin de semana largo y las elecciones, que generaron un aumento en la movilidad de personas, así como el inicio de la siembra agrícola.

Además, se menciona una mayor dependencia de importaciones de combustibles debido a paradas programadas en algunas refinerías y, más recientemente, una sobredemanda impulsada por la expectativa de escasez.

Las petroleras destacaron que la infraestructura de producción y suministro de combustibles en Argentina es sólida y que el país produce petróleo crudo y biocombustibles en cantidades significativas. A esto, cuentan con un parque refinador que tiene la capacidad de producir más del 80% de la demanda interna de naftas y diesel. Lo restante se importa según las necesidades de la actividad agrícola.

El comunicado subraya que el sistema de producción y transporte de combustibles está funcionando a pleno rendimiento, con registros récord en la producción y transporte de crudo. Se menciona que, si bien algunas refinerías están atravesando paradas técnicas totales o parciales debido a obras de ampliación y mantenimiento, esto es una práctica habitual y necesaria para garantizar la seguridad de las personas, la integridad de los activos y la calidad del producto.

Las petroleras aseguran que el flujo de crudo, el procesamiento en las refinerías y las importaciones continuarán para satisfacer la demanda, considerando la vasta dispersión geográfica de Argentina.

A pesar de las dificultades actuales, el compromiso de las petroleras es restaurar el abastecimiento de combustibles en el país en los próximos días y garantizar que los argentinos tengan acceso a los productos esenciales para sus necesidades de movilidad y consumo.