El arribo de Boric al país, en su primer viaje al exterior tras asumir la Presidencia de Chile a principios de marzo, "marca el inicio de una nueva etapa en la relación entre ambas naciones y esta es la expectativa transmitida por el canciller Santiago Cafiero a la nueva embajadora chilena, Bárbara Figueroa, con quien se reunió en las últimas horas", dijeron fuentes oficiales.

"Los gobiernos de Chile y Argentina compartirán una agenda común que incluye la promoción y protección de los derechos humanos, la centralidad de las políticas de género, el cuidado del medio ambiente, y la inversión en ciencia y tecnología e innovación para promover el desarrollo regional", añadieron las fuentes.

También destacaron que "la conectividad, como nueva clave de la integración regional, es uno de los aspectos relevantes", al aludir a la construcción del cable submarino puerta digital hacia Sudamérica que lanzaron el expresidente Sebastián Piñera y Fernández en enero de 2021.

Añadieron que "en términos regionales la Argentina tiene una mirada muy parecida a la agenda que expresa el presidente de Chile en cuanto a, fundamentalmente, resolver las desigualdades que hay en nuestro continente".

Los portavoces ensalzaron "las posibilidades de avanzar con políticas férreas respecto a los derechos humanos y la democracia, pero también sin olvidar la necesidad de un desarrollo económico para que esos derechos y para que esos valores se puedan desarrollar de un modo pleno en nuestra región".

Boric -quien derrotó en las elecciones al derechista José Antonio Kast representando al izquierdista partido Convergencia Social- arribó al aeropuerto de Ezeiza en un avión de la Fuerza Aérea de Chile que aterrizó alrededor de las 16 en el sector FOB (un área diferenciada del aeropuerto) y fue recibido por Cafiero.

Minutos después del aterrizaje, y tras el descenso de la numerosa comitiva que lo acompañaba, Boris, vestido con un ambo color oscuro y camisa blanca sin corbata, bajó de la nave acompañado por Cafiero. Al pie de la escalerilla se estrechó en un fuerte abrazo con la embajadora Figueroa y saludó a otras autoridades de su país y locales.

Luego de la bienvenida de rigor que le brindaron las autoridades civiles y militares y el recibimiento de la fanfarria del Regimiento de Patricios, Boric y Figueroa se retiraron en un auto oficial.