Desde la empresa manifestaron que es es una decisión a nivel global y que no tiene que ver con el contexto económico local y remarcaron que continuarán la comercialización de automóviles con su servicio post venta y repuestos en el mercado local y que a partir del año que viene se abastecerán de varias plantas a nivel global.

En la empresa trabajan actualmente unas 1.050 personas de los cuales el 40% están vinculadas con la producción de autos y el resto con la fabricación de motos y tareas administrativas. La compañía ya inició conversaciones con los sindicatos que representan a los trabajadores para evaluar las implicancias de esta decisión. Aunque aún no se habla de despidos, por lo pronto, la empresa abrió un plan de retiros voluntarios.

Desde el segundo trimestre de 2020, la planta ubicada en la localidad de Campana enfocará sus recursos en la producción de motocicletas, donde Honda es líder en el mercado.