La única forma de saber si alguien tiene el virus es a través del test que es voluntario, gratuito y confidencial. Acceder de manera temprana es fundamental para que las personas puedan iniciar un tratamiento y llevar una buena calidad de vida.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan que todas las personas de 13 a 64 años de edad se hagan la prueba por lo menos una vez como parte de la atención de salud de rutina. Las personas expuestas a mayor riesgo deben hacérsela con más frecuencia.

En la Argentina, de acuerdo al boletín sobre VIH, sida e ITS del Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación elaborado en diciembre de 2018, hay 129.000 personas que viven con el Virus de la Inmunodeficiencia Humana y el 20% de este grupo desconoce su diagnóstico. Cada día en Argentina 15 personas adquieren el VIH y 4 mueren a causa del SIDA, muchas veces por no conocer su diagnóstico a tiempo. El 98% de las transmisiones se dan por la vía sexual.

Según el informe del Ministerio, se debería acelerar el ritmo de los diagnósticos para alcanzar la meta del 90% de personas diagnosticadas para el 2020 y este primer 90 que implica el testeo y la confirmación del diagnóstico, es donde tanto en Latinoamérica como en la Argentina, se está trabajando para expandirlo.