El despacho de mayoría logró, finalmente, el aval de la totalidad de los senadores del peronismo -con el Frente para la Victoria, por un lado, y el interbloque Argentina Federal, por otro), pero con la disidencia del correntino Carlos Espínola, el jujeño Guillermo Snopek, el catamarqueño Dalmacio Mera y el salteño Rodolfo Urtubey.
Las firmas para el dictamen al que suscribieron el AF y el FPV se juntaron de manera artesanal, una por una, en medio de idas y vueltas de los representantes, con la inesperada llegada a último momento de la rúbrica de Urtubey, para darle mayoría.
Este último y Mera son hermano y primo, respectivamente, del gobernador de Salta, Juan Manuel, quien ayer se reunió a última hora con Macri en la Casa Rosada, para expresar su desacuerdo con la iniciativa y lanzar formalmente la última operación oficialista para trabarla: una contrapropuesta peronista para el macrismo de bajar el IVA en las boletas de los servicios públicos y mandar a su jefe de Gabinete, Fernando Yarade, a argumentar en contra en el plenario de comisiones.
Pasadas las 15 el jefe del interbloque AF Miguel Ángel Pichetto cerraba el apoyo, principalmente del FPV, de las comisiones de Derechos y Garantías, Minería y Energía y Presupuesto del Senado, al mismo tiempo el radical Naidenoff y el presidente del PRO, Humberto Schiavoni, intentaban desactivar la firma de senadores que responden a gobernadores, pero que aún no se habían sumado al dictamen. Todo al mismo tiempo que Rodolfo Urtubey escuchaba atento al jefe de Gabinete del gobierno de su hermano Juan Manuel argumentar contra la iniciativa opositora.
“Hasta ahora no hay un compromiso público respecto de bajar la tarifa de los servicios de luz, gas y agua. Yo no escuché ninguna. Ha habido iniciativa de algunos gobernadores de analizar la baja del IVA, pero eso tampoco apareció como un compromiso definido del Gobierno nacional”, decía Pichetto minutos después de tener una charla privada con Schiavoni y con el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo.
Minutos después, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner puso su firma al dictamen antitarifazos, al tiempo que su compañera de bloque Anabel Fernández Sagasti poroteaba los avales que faltaban.
Tras la alternativa que Macri le exigió al PJ y que Urtubey le regaló, los senadores de Cambiemos firmaron un dictamen en minoría para bajar el IVA en las boletas de los servicios públicos. Llamativamente, el gobernador salteño no colocó su iniciativa en el bloque del Senado que lo representa, sino en el oficialismo.
Para los usuarios residenciales, la alícuota actual del 21% pasaría a 10,5%, mientras que para pymes bajaría del 27% al 21%. El despacho prevé que estas modificaciones rijan por un año y que el Poder Ejecutivo nacional puede, arbitrariamente, prorrogar estas alícuotas diferenciales si la situación económica y social lo ameritan.

 

Fuente Política Argentina y En Línea